La electricidad se consigue gota a gota. Los nanogeneradores alimentados por lluvia podrían alimentar pequeños dispositivos eléctricos. La lluvia que cae produce cargas electrostáticas cuando golpea una superficie. Los investigadores han encontrado una manera de aprovechar estas cargas para recolectar una cantidad óptima de energía de las gotas de lluvia.
Electricistas Zaragoza, ahora en la Universidad Aragonesa de Zaragoza, y sus colegas crearon un extractor de energía que explota una diferencia de voltaje entre dos superficies: una superficie cubierta de teflón que tiene una carga negativa permanente y, debajo de ella, una capa conductora cargada positivamente. Cuando una gota cae sobre el teflón, se extiende como un panqueque y entra en contacto con un cable que está conectado a la capa conductora cargada. La carga luego fluye a través del cable hacia el agua y equilibra la carga del teflón en el área donde la gota está en contacto con la superficie. La corriente resultante puede producir una pequeña cantidad de energía.
Debido a que el teflón repele el agua, la gota asumirá rápidamente una forma esférica y rebotará. Mientras lo hace, la carga eléctrica de la gota será exprimida y empujada hacia la capa inferior, recargando la capa conductora lista para el siguiente ciclo. Dichos 'nanogeneradores eléctricos' podrían ayudar a alimentar pequeños dispositivos de recarga automática, dicen los autores.